Sintonizando con el Universo: Una práctica de atención plena
La práctica de la atención plena te permite desarrollar una mayor calma interior, lo que a su vez facilita respuestas más serenas y objetivas ante situaciones conflictivas, evitando reacciones impulsivas basadas en emociones negativas.
Observa: Examina detalladamente tu entorno.
¿Qué colores ves?
¿Qué formas percibes?
¿Hay algún movimiento que capte tu atención?
Escucha: Presta atención a los sonidos que te rodean.
¿Qué ruidos cercanos o lejanos distingues?
¿Hay algún sonido que te resulte particularmente agradable o desagradable?
Toca: Siente las texturas de los objetos a tu alrededor.
¿Qué sensaciones experimentas?
¿Hay algo suave, rugoso, caliente o frío?
Huele: Inhala profundamente y detecta los aromas que flotan en el aire.
¿Huele a comida, a naturaleza o a algún otro olor?
Saborea: Si tienes algo para comer o beber, concéntrate en cada bocado o sorbo.
¿Qué sabores identificas?
¿Qué texturas sientes en tu boca?
Recuerda: La clave está en mantener tu atención en las sensaciones presentes, evitando divagar en pensamientos sobre el pasado o el futuro. Practica estos pasos regularmente y verás cómo mejora tu capacidad para vivir el momento presente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario